Asistimos al I Microespacio de Cultura y Ciudadanía organizado por el Ministerio de Cultura en Madrid. Invitados por Benito Burgos, secretario general de cooperación cultural con la comunidades autónomas, y guiados por las preguntas de Fran Quiroga, pasamos una mañana intensa intentando enmarcar nuestras actividades api-culturales dentro del fértil terruño español. Conocimos a María Montesinos y su proyecto de ganadería ecológica “La Lejuca” y por fin tuvimos el placer igualmente de ponerles cara a la gente de “Inland – Campo Adentro”. Con todas ellas compartimos mesa junto al proyecto Alg-a Lab, la filósofa eco-feminista Alicia Puleo y nuestra compañera Coco Moya, que vino representando al Cubo Verde.
Muchas cuestiones abiertas, muchos caminos por recorrer y de nuevo encuentros con proyectos que nos hacen pensar que no estamos solas y que tejer en red es el objetivo de muchos proyectos “glocales”. Ante la dicotomía planteada entre rural y urbano (rápidamente desmontada por todas las que formábamos la mesa, incluidos sus organizadores) argumentamos desde Bee Time nuestro deseo de hacer cultura no sólo desde, con y para lo humano, sino también teniendo en cuenta con estas mismas preposiciones al resto de los seres que habitan los ecosistemas del planeta. Si no podemos articular diferencias claras entre lo rural y lo urbano (menos después del impacto de las revoluciones tecnológicas y de internet) sí que podemos hablar de la escasa biodiversidad de los ecosistemas en algunas ciudades y en una actividad humana centrada mucho más en lo humano que en el medio rural. A pesar de que el romero estaba en flor, no encontré ni una sola abeja en los parques de Madrid. Desde nuestra charla y en complicidad con Campo Adentro, hablamos de una necesaria revisión de la ley de apicultura urbana, siguiendo el ejemplo de otras ciudades como Valencia, en la que se trabaja por una legislación más permisiva en los huertos periurbanos.
Nos quedamos maravillados de las exposiciones de María y Amelie, respecto a la convivencia, cada una desde un ámbito bien diferente. María contaba sus experiencias como ganadera, el combate contra las limitaciones del patriarcado y su visión de la muerte como proceso desterrado por en la contemporaneidad. Amelie habló del barrio, de la mezcla de gentes que lo forman, de los procesos de ida y vuelta entre cultura y arte. Después hablamos con Fernando García Dory de la escuela de pastores que impulsan desde Campo Adentro y nos dio a conocer una curiosa publicación que esperamos reedite algún día para hacérnosla llegar. Una exquisitez de proyecto.
Con todo, agradecidos por el encuentro como representantes de Bee Time y Apijanda, tuvimos el gusto de conocer igualmente entre el público a otras mentes y cuerpos interesantes y estimulantes, como Rosina Gómez-Baeza y las chicas de Al fresco.
Sigamos tejiendo y cultivando sostenibilidad, para un mejor Antropoceno!
Gracias al Ministerio de Cultura y a Benito Burgos por su labor.
Esperamos seguir al tanto del resto de los encuentros!
Vídeo del encuentro:
Fotos: Microespacio Cultura y Ciudadanía (CyC): Rural Urbano